Con 46 votos a favor y 32 en contra, fue aprobada en el Congreso de la República la iniciativa del Gobierno respecto a la venta de su parte de la generadora de energía Isagén, lo cual significa el 57,61% de las acciones.
Los parlamentarios hicieron fuertes críticas respecto al tema, argumentando que esta venta generará serios problemas financieros, ambientales y sociales. “Isagén ha sido líder en responsabilidad social durante su trayectoria, en la ejecución de obras en cada una de sus hidroeléctricas. La más reciente se compone de acciones de protección ambiental en la Estación Piscícola San Silvestre. No debemos poner en riesgo más de 23.000 hectáreas de bosques y espejos de agua y más de 5.200 millones de metros cúbicos de agua, que hoy protege”, indicó una constancia escrita por 80 senadores de siete partidos políticos.
Para muchos es sorprendente el deseo del Gobierno, pues Isagén ha demostrado en los últimos años ser una compañía sólida y rentable. Según los senadores, la generadora aporta el 9.3% de la energía que consumimos y ha aumentado su capacidad en un 60%. “Es inadmisible que se pretenda vender un bien de la Nación a espaldas del Congreso y, por tanto, del país. Buena parte de la impopularidad del Gobierno viene de que no se oigan llamados inequívocos como este”, indicó la senadora del Partido Liberal Sofía Gaviria.
Los parlamentarios concluyeron en su escrito que: “Colombia no quiere la privatización del sector energético, que está en proceso de madurez y consolidación, porque se ponen en riesgo la independencia del país y el abastecimiento energético nacional, que, en caso de la venta de Isagén, podría padecer las consecuencias de una crisis como la que vivió California en los años 2000 – 2001”.
El Gobierno tiene previsto realizar la subasta de su 57,61% el próximo 19 de mayo y las compañías China Huadian Corporation, el fondo canadiense Brookfield Asset Management, la chilena Colbún y el grupo francés GDF Suez, son las interesadas en la compra. Gas Natural Fenosa anunció que no participará en la puja.
Entre tanto, el Comité de Defensa de Isagén decidió enviar una carta a cada uno de los ofertantes, recordándoles que en hay ocho demandas contra la venta de la empresa que no han sido resueltas.